Existe una extrañeza, cierta curiosidad, al imaginar a uno de los artistas más influyentes del siglo XX, el francés Marcel Duchamp (1887-1968), caminando por las calles de la ciudad de Buenos Aires. El padre del arte conceptual vivió durante nueve meses, entre 1918 y 1919, en un departamento que alquiló sobre la calle Alsina 1743, en pleno barrio de Monserrat, y se dedicó la mayor parte del tiempo a jugar al ajedrez en un club local. Infinidad de conjeturas y pocas certezas dejó la estadía en tierras rioplatenses del irreverente artista francés, creador de los ready made, una acción que implica sacar de su contexto a los objetos de uso cotidiano para convertirlos en obras de arte, como el famoso urinario rebautizado Fuente. Sobre la medianera del emblemático edificio, hoy declarado sitio histórico, el artista francés François Abélanet realizó un inmenso mural de 64 metros cuadrados en colores rojos, negros y blancos, con figuras que proponen un juego óptico a la vista de los desprevenidos transeúntes. Titulada L'anamorphose, la obra del artista francés está inspirada en otra del propio Duchamp y marca así un homenaje a su coterráneo.
L'anamorphose. Homenaje a Marcel Duchamp
Artista(s):
François Abélanet (FRA)
Eje(s) curatorial(es):
Modos de ver
Tipo(s):
Intervención
Permanente