Ali Cherri (nacido en 1976 en Beirut) es un destacado artista con una carrera que abarca el cine, la performance, la escultura, el dibujo y las instalaciones. Su trabajo aborda la violencia política en Líbano y otras regiones, explorando cómo la violencia se transmite en los cuerpos y los paisajes físicos y culturales. Influenciado por la escena artística postbélica de Beirut, Cherri investiga la relación entre las imágenes de conflicto, la estructura urbana y su propio cuerpo.
A través de intervenciones en colecciones arqueológicas, Cherri desafía los valores tradicionales en los museos, reintroduciendo fragmentos descartados como criaturas híbridas que representan la violencia colonial en la historia de la arqueología. Su tetralogía cinematográfica The Disquiet (2013), The Digger (2015), The Dam (2022) y The Watchman (2023) examina paisajes políticos en Líbano, Chipre y Sudán, dejando una huella de los eventos pasados. Cherri ha sido galardonado con el Silver Lion Award en la 59ª Bienal de Venecia.
El barro, como símbolo primordial de creación, es central en su obra escultórica reciente. En exposiciones como Humble and Quiet and Soothing as Mud (2023) y Dreamless Night (2023), Cherri anima el barro con representaciones monumentales, cuestionando las cronologías y la peligrosidad latente de la civilización. Su trabajo se relaciona también con Alberto Giacometti en la exposición Envisagement (2024) en el Institut Giacometti, París. La exposición Dreamless Night de Cherri se inauguró en febrero de 2024 en el Frac Bretagne.
